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Es comienzo el otro instante

el de antes y después

el agua que teme nadar.

Es comienzo su fisura que lava tu herida

cara a cara desearemos alejar la huella,

anudaremos rostro y fuente y orquídea

fuga

ardilla y brizna de hierba y deseo

retendremos la raíz nómada.

Es comienzo después de la enfermedad

después del dolor

después de la fornicación.

Es comienzo antes de la cura

antes del gozo

antes de la muerte.

La creación llama por tu nombre

obsérvalo fluir en tu corazón blando

entrégalo al habla y al ir palpa húmeda

la luz que me atraviesa.

Ese comienzo entra en las ruinas

con la intensidad infinita de un último soplo

con la constancia de un ruiseñor imposible

con la comisura acompasada de tus pechos

resbalando la Vía Láctea esta mañana en el jardín.

Es comienzo vencer la esperanza con la aspereza

de estos versos contra nadie,

acunando mi inmortalidad irás

desde el sombrío gusto abisal

hasta la infancia absoluta, al borde

del jardín.

(en un jardín atroz )

/Mecer